Dado el tiempo prolongado que se prevé que el Covid-19 permanezca en la sociedad, es importante tener medios que nos sirvan para establecer estrategias de prevención y detección precoz que, además de ser más baratos, nos permitirán conseguir antes la recuperación económica.
Para ello necesitamos:
1.- Dispositivos para el análisis de las aguas residuales que, mediante la detección de fragmentos víricos, indiquen carga viral existente y según la misma establecer recomendaciones de rastreo, seguimiento y control.
Los análisis pueden realizarse por colegios, residencias de mayores, centros sanitarios, barrios o toda una ciudad.
Los datos obtenidos deben analizarse mediante sistemas Big-data. (En Canarias el ITER dispone del segundo superordenador con más capacidad de nuestro país).
Los Cabildos y Ayuntamientos juegan un papel importante en esta labor.
2.- Rastreadores en número suficiente, 1/5.000 habitantes, coordinados con los Centros de Salud, independientes del personal sanitario, que se encargara del diagnóstico y seguimiento.
Su formación es muy rápida y su labor preventiva es fundamental.
Hay que señalar que debemos dotarlos de líneas telefónicas y la tecnología necesaria para llevar a cabo su labor con efectividad.
3.- Capacidad para realizar, con una periodicidad mensual, test de inmunoglobulinas y P.C.R a sanitarios, residencias de mayores, colegios y personal de riesgo, así como zonas, barrios o ciudades que sobrepasen los indicadores recomendados.
Además de servirnos para el diagnóstico, se pueden utilizar para rastrear el origen de los brotes mediante técnicas filogenéticas y así saber si son locales o importados.
Estos datos también deberán ser incorporados al sistema Big-Data y estar coordinados y protegidos por el Ministerio de Sanidad.
4.- Disponer de personal suficiente para la limpieza y desinfección de zonas públicas significativas: centros de salud, colegios, residencias de mayores, edificios y transportes públicos etc.… Con ello conseguiremos reducir la carga viral y evitaremos contagios o estos serán más leves.
Los Cabildos, Ayuntamientos y las Fuerzas Armadas, según el nivel de la pandemia, son fundamentales en este aspecto.
5.- Tener planificados lugares para el aislamiento de casos positivos con baja sintomatología (arcas), durante un periodo de 10-14 días.
Los contactos directos con positivos también se aislarán en sus domicilios, si socialmente es posible, y se les realizará una P.C.R. Los resultados no deberían tardar más de 48 horas y, al comunicárselos, de ser negativos, se les informará que deben avisar a su centro de salud si en los 10 días posteriores presentarán sintomatología compatible con Covid-19.
6.- Disponer de material de protección y aislamiento suficiente y pautas para su uso según circunstancias y situación. Tener un sistema de logística eficiente para su distribución.
7.- P.C.R en origen y control de los pasajeros en aeropuertos y puertos, sobre todo para las personas que proceden de lugares con indicadores de la pandemia peores que las del destino.
8.- Puesta en marcha de una APP de rastreo nacional dependiente del Ministerio en la colaboración con las CCAA, garantizando la privacidad de los datos e incorporándolos al sistema Big-Data.
9.- Campañas de formación e información al personal sanitario, docente y grupos de riesgo. Asegurar que exista personal suficiente y estable en estas áreas.
10.- Campañas de información y concienciación de forma periódica a la población para conseguir su compromiso con las recomendaciones generales: distancia, lavado de manos, ventilación de espacio cerrados y mascarillas.
La reducción de la carga viral es muy importante, no solo para evitar contagios sino también para reducir la gravedad de los síntomas de la enfermedad.
Comisión Permanente
Colegio Oficial de Médicos de Santa Cruz de Tenerife